Se cumplen 60 años de la firma del Tratado del Elíseo, suscrito por el presidente Charles de Gaulle y el canciller Konrad Adenauer el 22 de enero de 1963. De este Tratado surgió lo que los franceses llaman la “pareja” francoalemana, y los alemanes el “motor” francoalemán.
Hablar de Europa y remontarse al legado de Jerusalén, Atenas y Roma es un recurso habitual. También se suele hablar de las raíces de la cultura europea que parten del judaísmo, el mundo grecorromano y el cristianismo. Pero muchas de estas referencias se quedan en una visión historicista, que no es capaz de profundizar en lo que le sucede realmente a Europa.